Capítulo V: acto IV - El arcoíris destinado a arder
Bajo la fuente de los enigmas
> ¡Traveler, Paimon y Citlalí! Vienen en el momento perfecto. He descubierto el paradero de Capitano.
> Eso sí que no me lo esperaba. Así que Capitano busca el antiguo Mecanismo Fuentenigma para reconstruir las líneas ley...
> Pues si ya se ha puesto en acción, es porque ha encontrado una manera de conseguirlo. Tenemos que detenerlo de inmediato.
> Sí. Reconstruir no es arreglar, así que es prácticamente lo mismo que sacrificar todo lo que contienen las líneas ley actuales, un precio muy similar a usar la Gnosis.
> Si activa el mecanismo, todo habrá acabado. Necesitamos movilizar a nuestras fuerzas lo antes posible.
> Kinich, Xilonen, ustedes y yo. Los demás están luchando contra el Abismo en el frente de batalla.
> Me temo que eso no sería de mucha ayuda contra Capitano. Además, los Augures Vientonocturno necesitan urgentemente gente para defenderse. Citlalí, había pensado que podrías volver a la tribu para ayudar con la defensa.
> Volviendo al tema de antes, no creo que nuestro objetivo tenga que ser necesariamente derrotar a Capitano.
> Tengo una idea, pero esperen, voy a llamar a Xilonen y Kinich.
> Como todos sabrán ya, Ororon está colaborando con Capitano. Nuestro deber es detener el plan que quiere llevar a cabo.
> Capitano es un enemigo formidable, pero eso no debería amedrentarnos. En cualquier caso, no creo que un enfrentamiento directo sea la mejor solución.
> Su plan tiene una pieza clave: el Mecanismo Fuentenigma. Si sacamos el máximo provecho de nuestras fuerzas y actuamos por separado, podríamos destruirlo y, entonces, tendríamos el éxito asegurado.
> Iremos juntos, pero si la situación requiere un enfrentamiento directo, seré yo quien contenga a Capitano.
> Escuchen primero lo que tengo que decir. Kinich, quiero que saques a Ahau para que ataque directamente las defensas de los Fatui.
> Capitano no será quien defienda la primera línea. Un guerrero tan veterano como él sabe que debe estar cerca del mecanismo para garantizar que el plan salga bien.
> No, el propósito de un ataque frontal es juntar a todos los soldados Fatui. Así, a los demás nos será más fácil evitarlos.
> Xilonen, necesito que hagas lo que mejor se le da a los Vástagos del Eco: crea un túnel cerca de las ruinas antiguas para que podamos acercarnos al mecanismo. Cuando lo hagamos, solo tendremos que destruirlo.
> Sí, y por eso Traveler y yo iremos con ella.
> Nadie sabe crear disturbios tan bien como tú, Kinich, ni siquiera yo. Si cada uno hacemos nuestra parte, tendremos una oportunidad de romper la línea de defensa de Capitano.
> Gracias. Y sí, les prometo que actuaré con mucha cautela.
> Aquí es. Su túnel debe de estar detrás de esos guardias Fatui.
> No hay muchos Fatui en el perímetro. Deberíamos encargarnos primero de ellos para que no den la voz de alarma.
> ¿Qué te parece este lugar, Xilonen?
> Este es un hechizo de los Augures Vientonocturno, más concretamente, de Ororon. Seguramente estén intentando ganar tiempo.
> ¡Alto!
> Pasa algo...
> *Tch*...
> ¡Ororon! ¡Ororon!
> Controla tu mente y sé consciente de donde estás. ¡Este no es tu fin!
> Bien hecho, muchacho. Has conseguido hacer lo imposible.
> Un alma dañada es algo muy delicado. El dolor casi te consumió, pero conseguiste mantener el control... Y eso no es nada fácil.
> Ya hablaremos de eso más tarde.
> Ororon, jamás pensé que de verdad quisieras sacrificarte durante aquel ritual, pero aun así, nunca te rendiste. ¿Sabes ya qué es lo que quieres realmente?
> Pues la respuesta que buscas está frente a ti.
> Cuánto tiempo, Sanhaj. Gracias por reconocer la valía del quinto héroe de esta era.
> Tal y como pensaba... La Señora de la Noche se ha despertado.
> La frontera del mundo se rompió en la antigua batalla entre los dragones y el Descendido, lo que dio lugar a la irrupción del Abismo. En consecuencia, las líneas ley de Natlan fueron las que más daño sufrieron.
> La Señora de la Noche reunió los fragmentos de las antiguas líneas ley para reconstruir una red similar y, de ese modo, ayudar a los habitantes de Natlan. Así fue como se creó el Reino de la Noche.
> Luego, Ixbalanqué, el primer Arconte Pyro, reforzó dicho reino y estableció las reglas de la lucha contra el Abismo, es decir, la «Oda de la resurrección» y el Peregrinaje del Retorno del Fuego Sagrado, los cuales siguen vigentes hoy en día.
> No voy a hacerlo.
> Si reconstruimos unas nuevas líneas ley, tú desaparecerás y las reglas de Natlan, que se cimientan sobre el Reino de la Noche, dejarán de existir.
> También desaparecerán los recuerdos y las leyendas registrados en las antiguas líneas ley, lo que provocaría trastornos mentales en la gente de Natlan, pérdida de memoria y otros problemas cognitivos.
> Tanto usar la Gnosis como tejer una red de almas y recuerdos conllevan un precio que no estoy dispuesta a pagar.
> ¿Y qué pasará cuando las nuevas líneas ley vuelvan a ser invadidas por el Abismo? ¿Con qué lucharán las futuras generaciones de Natlan?
> ¿Cuánto tiempo podrá sobrevivir una tierra que no está bajo la protección de la Señora de la Noche y de unas reglas?
> Tienes razón. El dolor, el arrepentimiento y el desastre... me siguen atormentando en sueños incluso a día de hoy.
> Porque no tenemos derecho a tomarla.
> Amamos este mundo porque contiene nuestra felicidad y nuestras emociones, y porque es lo que ha moldeado nuestra voluntad y forma de pensar.
> Renunciar a nuestra historia y nuestros recuerdos sería como reiniciarlo todo. La gente se convertiría en alguien completamente distinto y lo único que la conectaría a su antiguo yo sería su cuerpo.
> O tal vez la historia se repetiría. El Abismo nos invadiría otra vez y nada habría tenido sentido.
> Debes de tener una conexión muy profunda con esta tierra para querer salvarla con tanto empeño.
> Y tú, ¿qué es lo que deseas proteger? ¿Esta tierra o a su gente?
> Gracias. Sin duda, es una gran noticia que podamos contar con la ayuda de un miembro de Los Once tan fuerte como tú.
> Es posible que tengamos diferentes visiones de la vida, pero al menos podemos luchar codo con codo.
Viendo juntos el ocaso
> Permíteme, pues, dar la bienvenida a los Fatui oficialmente.
> Nos enfrentamos a un enemigo común, por lo que es hora de dejar atrás nuestras diferencias y mirar juntos hacia el futuro.
> En cuanto a Ororon, no hay duda de que sus acciones sobrepasaron muchos límites, pero no voy a castigarlo ahora mismo. Me gustaría darle una oportunidad para que demuestre su valía.
> Todo ha ido ocurriendo de una manera que no esperábamos, pero por fortuna, el final ha sido favorable para todos.
> Qué bien que hayan llegado ya, así podemos hablar de algunos problemas más complejos. Empecemos con el Mecanismo Fuentenigma. ¿Cómo lo encontraste, Capitano?
> Vaya, nunca había oído esos nombres.
> Veo que, al buscar gente para mi propia investigación, no llamé a algunas personas clave.
> Sí, al menos tenemos un nuevo plan que nos permitirá ganar más tiempo que si usáramos directamente la Gnosis.
> Si todo lo demás falla, aún tenemos ese plan como último recurso, aunque hacerlo conlleve un coste muy alto.
> Así que fue él... Es verdad que conocía el secreto. De hecho, en muchas ocasiones me aconsejó usar ese método para evitar la catástrofe, pero yo siempre me negué.
> Entonces, si conoces a Ayizu y llevas mucho tiempo luchando en Natlan, ¿cómo es que no te reconozco?
> Ah, claro, es por tu máscara...
> Jamás lo hubiera dicho. Al menos durante nuestro duelo, pensé que habías alcanzado el culmen de las habilidades humanas.
> Lo mismo digo. De haberlo hecho, yo también lo habría dado todo.
> Nuestras fuerzas están igualadas. De haber seguido luchando, habría sido una cuestión de quién estaba menos dispuesto a perder.
> No cambiaré de parecer en cuanto a la Gnosis, así que será mejor que nos concentremos en el Abismo por ahora.
> Así es. El trono divino contiene un gran poder capaz de hacer frente al Abismo, pero solo se puede usar una sola vez. Ese poder lo obtuvo Ixbalanqué de Ronova.
> Ronova es una deidad incluso anterior a los Arcontes. Se podría decir que es una de los emisarios del Orden Celestial. En concreto, el poder que controla Ronova es la muerte.
> Sí, las reglas de Natlan existen gracias a ella. Pero volviendo al tema del poder del trono divino...
> Como ya les dije, cuando un humano asciende a él, siente en su interior un fuego ardiente, y el tamaño de dicho fuego depende del potencial de ese humano.
> El poder de la Soberana de la Muerte funciona exactamente igual, con la única diferencia de que no tiene en cuenta la resistencia de cada persona.
> Lo que significa que no todo el mundo es capaz de soportarlo.
> Sin embargo, quien supere tal prueba obtendrá un poder sin precedentes. No solo se volverá extraordinariamente fuerte, sino que también dominará un poder aún más formidable que el de los Arcontes.
> ¿Qué no ha conllevado ningún riesgo en todo este tiempo?
> Mualani no vaciló ni un segundo cuando entró en la zona contaminada del Reino de la Noche, y Ororon luchó con uñas y dientes estando al borde de la muerte...
> Y por eso, no puedo defraudarlos. Yo también debo cumplir mi deber.
> Creo que ya hemos hablado suficiente por hoy. Vamos, vayan a descansar, deben de estar muy cansados.
> Es posible que el Abismo haya percibido un cambio en Ororon y ello aumente la frecuencia de las invasiones, así que debemos estar bien preparados para lo que venga.
La marea oscura inminente
> De acuerdo, enviaré refuerzos a esos dos lugares. Este otro es demasiado peligroso, iré yo personalmente.
> El resto de los lugares están un poco lejos y no están habitados, así que ordenaremos la retirada de los guerreros. Pero que tengan cuidado de no resultar heridos mientras regresan.
> Sí, no pinta nada bien. Nuestras fuerzas pudieron lidiar con los ataques esporádicos, pero ahora hay muchos más monstruos y cada vez están apareciendo con más frecuencia.
> Toda Natlan. No solo las cercanías de la Arena, sino que hasta zonas tan remotas como la Comunidad de la Feracidad han avisado de que están siendo atacadas.
> Pronto seremos incapaces de hacerles frente, sí. Creo que el Abismo está muy inquieto porque sabe que solo queda uno de los seis héroes.
> Sin embargo, ahora mismo no tengo fuerzas para luchar. Es tanto su mejor como su última oportunidad.
> Será una guerra larga. Ahora debemos concentrarnos en proteger a los civiles y conservar nuestra fuerza.
> Hay muchos soldados ayudando a comerciantes y aventureros que están atrapados en la naturaleza, pero seguimos necesitando más gente.
> De acuerdo. Xilonen, Kachina, vayan a ayudar al campamento que hay cerca de los Vástagos del Eco. Citlalí, a ti te necesitan los Augures Vientonocturno.
> Sin embargo, tu tribu está lejos de la Arena Sacrofuego, así que Ororon, que es una de las personas más importantes para nuestro plan, se quedará aquí.
> He preparado un globo aerostático para que puedan llegar rápidamente a sus destinos.
> Cuando hayan terminado su misión, informen a los mensajeros de los Retoños Arbóreos que están viajando por toda Natlan. Ellos recopilarán la información en un informe de guerra.
> Así, planearé su siguiente movimiento de acuerdo con la información recibida.
> Según un mensajero, hay un pequeño equipo que fue atacado mientras escoltaba hasta aquí a unos civiles, pero no podrán aguantar mucho más.
> ¿Creen que podrán con eso?
> Bien. El globo ya está listo. Vayan.
Desesperación caída del cielo
> Gracias por todo, Chuychú.
> Chasca, lo siento mucho.
> Sí.
> Es hora de poner fin a esta guerra.
> ¿Están todos listos?
> Estamos ante una cruenta guerra. La victoria comienza en nuestra cabeza. Así pues, prendan en mí el fuego de la victoria.
> Que nadie más pierda la vida, y que nadie más tenga que sufrir la pérdida de un ser querido.
> Héroes de todas las eras, ha llegado el momento.
Un combustible llamado “destino”
> Estamos aquí reunidos para celebrar esta gran victoria.
> Una victoria que hemos conseguido todos juntos, y de la que todos tenemos derecho a sentirnos orgullosos.
> ¡Hemos vuelto a sobrevivir una gran catástrofe y hemos salvado nuestro querido hogar!
> No les voy a engañar. Esta guerra aún no ha acabado y aún no hemos exterminado por completo al Abismo, sino que este solo ha huido a su guarida, situada en un lugar aún más profundo que el Reino de la Noche.
> Sin embargo, el Abismo infravaloró nuestra fuerza y, al lanzar esta ofensiva, lo dejamos malherido, de modo que no volverá a amenazar Natlan en un tiempo.
> Una vez que estemos bien preparados, le lanzaré nuestro último ataque y entraré en su guarida para acabar de una vez por todas con él.
> Sí. El poder del Abismo es muy intenso en el lugar en el que se encuentra. Si alguien corriente entrara en contacto con él, moriría al instante.
> Seguro que todavía están todos entusiasmados y deseando luchar contra el enemigo, pero les pido que aplaquen sus ambiciones. Regresaré victoriosa por todos nosotros.
> No debemos ver esto como un hecho aislado. La victoria de hoy ha sido gracias a todos ustedes, así que esta noche toca celebrarlo.
> Llegado el momento, les avisaré a todos de nuevo.
> Por otro lado, no podemos olvidar a los guerreros que dieron sus vidas por Natlan en esta guerra.
> Una vez que hayamos erradicado por completo al Abismo, me aseguraré de celebrar un funeral digno para ellos.
> Un nombre antiguo no puede registrar todo lo hecho por un grupo, pero las hazañas de todos los héroes deben ser recordadas por Natlan.
> Además de agradecer a todos y cada uno de nuestros guerreros, también debemos dar las gracias a El Capitán por el extraordinario apoyo que nos ha brindado.
> Disfruten del festín de la victoria. Espero que aprovechen para relajarse, reavivar su espíritu y reponer fuerzas de cara a lo que nos queda por delante.
> Ah, hola.
> Supongo que sí. Cuando estaba en el cielo, pude ver toda Natlan... Y vi cómo la gente lo daba todo para ganar la guerra.
> De haber sido un poco más rápida, nadie habría... Chuychú no habría...
> Lo siento, no debería estar hablando de esas cosas en un momento como este. A ver, ¿un juguito, como siempre?
> Sí. Ya casi he llevado a cabo por completo el plan de hace quinientos años. Solo queda un último paso.
> Y es la batalla final contra el Abismo. El combate es algo natural para mí, así que no siento demasiada presión.
> Lamento decirte que eso solo fue posible porque el trono divino liberó todo mi potencial. Si usara ese poder más de seguido, mi cuerpo no lo soportaría.
> También se ha ido el poder especial de la «Oda de la resurrección». A partir de ahora, solo la podremos usar con herederos de nombres antiguos.
> No. El Abismo ha resultado gravemente herido, así que de momento no puede llevar a cabo invasiones frecuentes.
> Me gustaría que la gente disfrutara de este periodo de paz... Y, si no hay imprevistos, la paz se podrá prolongar durante mucho más tiempo.
> Llevamos siglos luchando contra el Abismo, y ya es hora de ponerle punto final.
> Por cierto, tengo curiosidad por una cosa. En tus viajes por otras naciones, siempre has estado en el centro de todo y has luchado contra enemigos muy poderosos.
> Durante la guerra, no dejaste de ir de un lugar a otro sin cansarte. Si solo eres un viajero, ¿por qué arriesgas tu vida y la pones en juego por una causa que no es tuya?
> Con la conciencia tranquila... Me gusta esa respuesta. Sí, la vida debería vivirse al máximo y sin arrepentimientos.
> En fin, lo que quiero decir es que... me encantaría que tú, con tu extraordinario talento y tu sentido de la justicia, lucharas conmigo hasta el final para poner fin a la amenaza del Abismo.
> Pero no quiero que pienses que me estoy aprovechando de tu bondad y tu disposición para ayudar a otros. Al fin y al cabo, será una batalla peligrosa y, para ti, lo más importante es tu viaje.
> Bueno, deben de estar agotados. Será mejor que hoy descansen bien. Nos vemos mañana en la Cámara Asamblearia.
> Explicaré lo que haremos para la batalla final. Espero que puedas darme una respuesta para entonces.
> “Puedo acertar a esos nachos que tienes en la cocina desde aquí”.
> “Yo también tendré un nombre antiguo, y será mucho mejor que el tuyo”.
> “¿Te preocupa no poder volver a ganarme en un duelo de lucha?”.
> Adelante.
> Gracias por venir. Tal y como les dije, me gustaría hablar con ustedes sobre mi plan para hacer frente al Abismo.
> Pero antes de eso, ¿cómo va el tema del nombre antiguo?
> No pensé que fuera a ayudarte... Bueno, supongo que al hacerlo, también me está ayudando a mí. Le estoy muy agradecida.
> Así es. El Abismo se ha apoderado de las profundidades del Reino de la Noche, un lugar que lleva mucho tiempo corroído por su poder.
> Si no arreglamos de raíz el problema de las líneas ley, podría volver a haber una guerra como la de ayer y la gente de Natlan seguiría viviendo amenazada.
> Ese es el destino al que Natlan se ha tenido que resignar desde siempre. Hemos luchado en la frontera con la oscuridad durante miles de años, y nunca hemos vivido una auténtica paz.
> Pero ahora, quiero romper el bucle y liberarnos de ese destino de una vez por todas.
> Puedo protegerme con el poder del Fuego Sagrado, pero aparte de mí, tú eres el único capaz de aguantar la contaminación que hay allí.
> Si es imposible forjarte un nombre antiguo, iré yo sola, pero si sí es posible, entonces me gustaría contar con tu ayuda.
> No del todo. Al fin y al cabo, el Reino de la Noche sigue sufriendo la corrosión del Abismo.
> Pero gracias al poder del trono divino, sí pude aminorar bastante la cantidad de poder del Abismo que hay allí. Además, tu nombre antiguo es un caso especial, así que la Señora de la Noche cuidará de ti de modo excepcional.
> En conclusión, aunque la «Oda de la resurrección» tiene sus límites, puedo asegurarte que funcionará sin problemas en ti.
> El Abismo es un ente traicionero. Si siguen moviéndose juntos, podría tomarte a ti como objetivo y eso nos pondría en una difícil situación.
> Gracias por entenderlo.
> Toda Natlan sabe lo importante que es la batalla final. Tras ella, todo el mundo te lo agradecerá y te recordará hasta el fin de los tiempos.
> Si tienen alguna pregunta, ahora es el momento.